En la actualidad, el mundo depende prácticamente de los combustibles fósiles para la producción de energía, debido a la forma en que el sistema de esta funciona. No obstante, con el paso del tiempo, la búsqueda por generar energía a través de alternativas más rentables y amigables para la salud de las personas y para el medio ambiente es algo que ha ido creciendo considerablemente. En este sentido, las energías renovables, como es el caso de la energía eólica, empiezan a ser una apuesta cada vez más fuerte en países de todas partes del mundo, particularmente en casos como el de Argentina donde las condiciones climáticas favorecen su producción.

Efectos negativos de la producción de energía con combustibles fósiles

A medida que el tiempo pasa, se va generando cada vez más conciencia respecto de los efectos negativos de producir energía utilizando combustibles fósiles. Por un lado, se produce un agotamiento de los recursos naturales no renovables, a la vez que se provoca una poderosa contaminación ambiental y se genera dependencia energética. Además, es de público conocimiento que hay un futuro de reducción de los recursos de estas fuentes, lo que acabará llevando a desabastecimiento de energía dentro de un tiempo, por lo que es necesario comenzar a desarrollar especialmente otras fuentes.

¿En qué consiste la energía eólica y qué beneficios tiene?

En un contexto como el mencionado con anterioridad, la energía eólica y otras fuentes de energías limpias y renovables empiezan a tener un mayor crecimiento. Esto se debe no sólo a que se basan en recursos inagotables, sino que además reducen sustancialmente la contaminación y permitirían alcanzar la autonomía energética.

La energía eólica se puede definir como una fuente de energía renovable que no contamina y que reduce el uso de combustibles fósiles al no ser estos necesarios para su producción. Por el contrario, como su nombre lo indica, se nutre del uso del viento como combustible, utilizando aerogeneradores que se encargan de transformar la energía cinética de las corrientes de aire y viento en energía eléctrica. Es por eso que es una energía renovable, a la vez que es eficiente, especialmente cuando se desarrolla en territorios que poseen condiciones climáticas adecuadas para ello.

Los beneficios de invertir en energía eólica

De la mano de esto, podemos destacar los siguientes beneficios que trae consigo la energía eólica y que hacen que sea una excelente alternativa en la cual invertir:

Es una fuente inagotable

La fuente original, que es el viento, es inagotable. A diferencia de los combustibles fósiles, esto permite tener la seguridad de que se podrá seguir produciendo energía eólica con el paso de los años, estando este recurso especialmente presente en distintas partes del mundo, como Argentina.

Los territorios son restaurables

Distinto a lo que sucede con la explotación de combustibles fósiles que daña el entorno natural, los terrenos que son ocupados por partes de producción de energía eólica pueden ser restaurados completamente, manteniendo las características del territorio preexistente.

No se necesita mucho espacio

Si se compara con la energía fotovoltaica, por ejemplo, la energía eólica necesita de poco espacio para poder producirse y además se produce durante las 24hs.

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