En un contexto en el que existe un interés creciente por la posibilidad de generar energía a través de fuentes limpias y renovables como el viento, Argentina es un país que se caracteriza por tener condiciones aptas en este sentido. Los vientos representan uno de los elementos climáticos más determinantes en el país, especialmente en la Patagonia y el centro.

¿Cómo son los vientos locales en Argentina?

Cuando hablamos de viento, estamos haciendo referencia a una masa de aire que se encuentra en movimiento en la atmósfera terrestre. Es algo que en todos los casos se genera por causas naturales, como pueden ser la acción del calor del Sol y los movimientos de rotación del planeta.

En el caso particular del país, los vientos están determinados por un centro de ciclón estacional y por dos anticiclones. En este sentido, los vientos cálidos y húmedos que circulan por el país son los que proceden del anticiclón Atlántico Sur, afectando especialmente las regiones ubicadas al norte del Río Colorado y provocando abundantes precipitaciones fundamentalmente en la zona noreste del país.

En lo que respecta al anticiclón del Pacífico Sur, este influye sobre la región patagónica particularmente. Son vientos que llegan desde el Pacífico Sur y que también están cargados de humedad, provocando precipitaciones abundantes mayormente sobre los Andes Patagónicos. Pero, además de generar lluvias, es importante destacar que son vientos que funcionan como una barrera de condensación. Lo que esto hace es que, al final, el resto de los vientos que llegan a las mesetas patagónicas lo hagan siendo prácticamente secos.

Los cuatro vientos locales argentinos

Teniendo en cuenta lo anterior, podemos afirmar que, en Argentina, encontramos cuatro vientos locales que tienen influencia en el clima que se da en las diferentes regiones a lo largo de todo el año. Estos son los siguientes:

Sudestada

La Sudestada se define como un viento húmedo y frío que genera precipitaciones a lo largo de varios días, teniendo lugar especialmente entre los meses de abril y diciembre. Una de sus particularidades es que impide el libre desagüe del Río de la Plata, pudiendo generar inundaciones mayormente en la Provincia de Buenos Aires y en las localidades a la orilla del Río Paraná.

Viento norte

En el caso del viento norte, hablamos de una prolongación estival de los alisios del NE y el anticiclón del Atlántico Sur, siendo algo periódico. Siempre se presenta como un viento suave cargado de nubes que, al pasar los días, puede perturbar el cielo con humedad y con exceso de calor.

Zonda

Sobre el Zonda, lo que podemos decir es que es un viento que puede alcanzar temperaturas de 40°C y una velocidad de 60 km/h. Afecta especialmente a las provincias del centro del país y ubicadas en la Cordillera, como son Catamarca, Mendoza, La Rioja, San Juan y San Luis. Es un viento que tiene lugar entre los meses de mayo y octubre y se origina en el anticiclón del Pacífico Sur.

Pampero

Finalmente, el pampero se destaca por ser un viento frío y seco que proviene del anticiclón del Pacífico Sur y que cruza los Andes y la Patagonia, ubicándose en la zona de la llanura pampeana, atraído por un centro de baja presión. Dicho centro tiene lugar como consecuencia de los vientos cálidos y húmedos que ingresan desde latitudes menores y que, al chocar como dos frentes de aire de distintas temperaturas y distintos niveles de humedad, provocan abundantes lluvias.

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